«Tiene mucho talento, señor Strode.»
Luther Strode es un personaje creado en Image Comics y cuya historia se desarrolló en una trilogía de miniseries; The Strange Talent of Luther Strode #1-6 (de octubre de 2011 a marzo de 2012), The Legend of Luther Strode #1-6 (de diciembre de 2012 a agosto de 2013) y The Legacy of Luther Strode #1-6 (de abril de 2015 a mayo de 2016). Sus creadores son Justin Jordan (guionista), Tradd Moore (dibujante) y Felipe Sobreiro (color). La última miniserie incluía como backups una pequeña historia guionizada por Tradd Moore, dibujada por Stephen Green y con colores de Felipe Sobreiro. Tenía por título «The twins» y se centraba en la historia de estos personajes de la serie principal. Inicialmente iba a desarrollarse como complemento en los números The Legacy of Luther Strode #2-5, pero la historia quedó inconclusa ya que la última entrega no llegó a tiempo (faltó el backup del #5).
Creo que no es nada descabellado afirmar que casi todos los que ahora somos apasionados del comic americano «independiente» (que yo prefiero llamar «de autor»), que promulgan editoriales como Image Comics, Dark Horse o Aftershock, hemos llegado aquí pasando antes por los superhéroes americanos, de DC y Marvel. Es por eso, que puede que tengamos bastante afinidad a la hora de leer series superheroicas pero llevadas a cabo en estas editoriales que dejan toda la libertad sobre la obra a sus autores, consiguiendo originalidad, frescura y nuevos enfoques que cuesta más que se den en las dos grandes. Es de sobra conocido el caso de Invencible, de Robert Kirkman, obra aplaudida de manera constante, Black Hammer de Jeff Lemire, u otros casos no tan encumbrados pero definitivamente de calidad, como Plutona de Jeff Lemire, Emi Lenox y Jordie Bellaire.
Dentro de estos superhéroes «independientes» (si se me permite la licencia) es donde yo enmarcaría a Luther Strode. Es cierto que no es un superhéroe per se, pero bebe indudablemente del género aunque utilice otros registros y reglas.
Luther (¿Peter Parker?) es un adolescente que podríamos catalogar de manera políticamente correcta como «poco popular». Es bastante enclenque y él y su mejor amigo Pete son víctima de burlas y ataques, principalmente por parte del chico deportista y popular del instituto; Paul Jacobson (¿Flash Thompson?). También hay por ahí una chica alternativa, guapa, pelirroja y carismática llamada Petra Dobrev (¿Mary Jane?) que sorprendentemente se fija en Luther. Cansado de la situación, Luther encarga un libro; El método Hércules, con el que supuestamente conseguirá un cuerpo musculoso (guiño a los anuncios de los cómics que prometían lo mismo) que Luther confía que será la solución a todos sus problemas. Increíblemente, siguiendo este sospechoso método que involucra mente y cuerpo, consigue un cuerpo realmente hipertrofiado que viene además con reflejos sobrehumanos, capacidad para leer los futuros movimientos de las personas, agilidad y superfuerza y una visión un tanto descorcentante de los seres humanos como cúmulos de músculo sin piel. Por supuesto, Pete no tarda mucho en convencerle de que se tiene que transformar en un justiciero.
Pero lo que no saben es la antiquísima historia detrás del método Hércules; una historia que implica sangre, violencia y poder. A lo largo de los años, desde el creador del método, Caín (sí, el hermano favorito de Abel), casi todos los que han sustentado este poder ha sido para convertir a las personas en sus esclavos, exterminarlos o servir a Caín. Y Luther, con su gran dominio de las habilidades del método, llama la atención de Caín y su culto, por lo que la seguridad del entorno de Luther se verá afectada de manera drástica.
A partir de ahí comienza una historia extraordinariamente violenta, donde las muertes, desmembraciones, y la sangre serán la constante. A lo largo de la trilogía, tendremos un claro «camino del héroe», que primero descubre sus poderes y pierde su inocencia e ignorancia al enfrentarse al Bibliotecario (the Librarian) (secuaz de Caín destinado a preservar el conocimiento del método y que es enviado a reclutar a Luther), para después enfrentarse a la lucha interna entre lo que le han dicho que es y lo que realmente quiere ser y por último afrontar su destino como héroe. Está claro que Justin Jordan no inventa nada nuevo, pero nos regala unos personajes y una mitología muy interesante, en una historia sencilla pero que atrapa al lector, que se verá obligado a permanecer al lado de Luther hasta el final, combatiendo cada vez con un enemigo superior al más puro estilo Dragon Ball.
Una cosa que me ha gustado mucho ha sido como Justin Jordan introduce su método Hércules y en definitiva, su nueva mitología dentro de la «historia» de la humanidad. La cosa no se queda en Caín como primer portador de este poder basado en la violencia, sino que veremos otros personajes biblícos, históricos e imaginarios con el mismo poder; Delilah (Dalila), Sansón, Mushashi, Juana de Arco, Jack el Destripador…
Durante la serie tendremos la oportunidad de plantearnos el valor y la efectividad de la violencia como solución al reflexionar sobre las opciones de cada individuo. Habrá distintas respuestas posibles y una clara ganadora. La obra posee un ritmo desenfrenado y suele buscar el cliffhanger, pero no de manera superficial, sino de forma efectiva. Se evita caer en antiguos estereotipos del género, como el de la necesidad, por parte del interés romántico del héroe, de ser salvada, ya que Petra Dobrev es una mujer de armas tomar, que no huye del peligro sino que se enfrenta con todo a él. También seremos testigos de una triste historia de abusos en el pasado de Luther y su madre, que acabará siendo un reto definitivo para el protagonista. Pese a que en un principio parece que estamos ante una obra superheroica, pronto se tornará en una oscura historia de un violento justiciero para acabar siendo un desafío de un elegido contra algo mucho más grande que él, y toda esta evolución se hace de una manera totalmente orgánica y lógica, demostrando que pese a que el argumento no es nada excesivamente intrincado, la estructura y la obra en su totalidad está totalmente planificada con minuciosidad y mimo por parte de los autores, creando un producto perfectamente acabado.
Las tres miniseries de Luther Strode componen, en definitiva, un mosaico irresistible, de acción desenfrenada y gore absoluto (de verdad, no podéis ni imaginar las sangrientas barbaridades que se ven), que posee un ritmo endiablado en una historia con un claro destino y con una narración desenfrenada. Destaca su frescura y su falta de complejos, así como unos personajes interesantes y siempre molones, una lectura perfecta para pasarlo en grande y con un apartado gráfico increíble, pero de eso hablamos ahora…
Apartado Gráfico
Sólo por el apartado gráfico ya merecería la pena la obra, porque lo que ocurre en sus páginas, es simplemente de otro mundo. Tradd Moore posee un estilo totalmente único con el que es capaz de crear unos personajes deformes pero orgánicos y sobre todo una acción, movimientos y desarrollos increíbles. Su capacidad para transmitir el dinamismo es increíble, recordando un poco al manga, y cuando algún personaje choca con algo, los efectos que esto produce le volarían la mente a cualquiera, en una especie de deformaciones dimensionales que quedan preciosas. Es muy minucioso a la hora de plasmar detalles y su narración gráfica y secuencias de lucha son magníficas. A lo largo de las miniseries veremos una evolución importante del dibujante, desde la primera, donde era un poco más rígido hasta la última, donde ya está suelto a unos niveles exagerados y ha conseguido un dibujo mucho más limpio.
Por otro lado, en los backups, Stephen Green hace un trabajo más comedido pero también bueno. Su estilo está más afianzado en la realidad que el de Tradd Moore y sus trazos juegan mucho con el peso de la línea. El único problema es que después de leer un número entero con el arte de Moore, el dibujo de Green, aunque bonito, sabe a poco.
El color corre a cargo de Felipe Sobreiro, que complementa a la perfección a ambos artistas, adaptando la paleta muy inteligentemente a ambas historias. No se corta con el color rojo y eso es fundamental, ya que en una obra tan sangrienta como esta, cuanto más destaque la sangre, mejor.
Ediciones
En Estados Unidos, hay tres ediciones de la obra; las grapas originales, tres volúmenes TPB conteniendo cada uno una miniserie y una edición Deluxe HC completa con las tres miniseries en un tomo de mayor tamaño encuadernado en cartoné.
En España, por desgracia, sólo de llegó a editar la primera miniserie, lo hizo Panini Cómics en un tomo en rústica que ya está descatalogado, pero no siguió con las dos miniseries restantes.
Paranoia Secuencial 