«¡Seguid a este hombre, él os guiará hasta el mar!»
Un viaje hacia la salvación suele comenzar desde la perdición más profunda, y de ahí partimos en Juan Buscamares; el mundo desértico e inhóspito que muchar veces se profetiza que llegará por culpa de nuestro estilo de vida tan «avanzado», aquí ya es una dura realidad.
Con todos los mares y océanos secos, la humanidad ha quedado reducida a pequeños grupos aislados, que se aferran a la vida con sus últimos alientos gracias a ciertas emociones; unos recurren a la fe ciega, otros abrazan las raíces familiares, algunos deciden vender a los suyos por conseguir agua, mientras que otros recurren a la violencia más pura. En esta realidad, la figura de Juan, un hombre solo y sin ningún objetivo aparte de vagar por estos páramos, se revela como el salvador, el Buscamares que salvará la Tierra y la vida que la puebla; un mesías para un mundo desesperado.
Una historia que sufre una metamorfosis increíble desde la primera página hasta la última, partiendo de un relato post-apocalíptico que recuerda a Mad Max y en el que se respira crueldad y desesperanza, despliega las alas al mostrarse como una profecía bíblica y explotar como la realidad de la mitología inca fusionada con lo onírico con El Principito de por medio. Una trama que salta de lo sencillo a lo inabarcable pero permitiendo y obligando al lector a quedarse hasta el final para poder saber hasta dónde llegará el Buscamares.
Desde que salió el integral, ya he leído Juan Buscamares tres veces y sigue siendo la historia profunda y emocionante que me enamoró, y cada vez que lo releo creo estar más cerca de comprenderlo, para momentos más tarde, darme cuenta de que Juan ha vuelto a estar por encima de mí y que el final sigue siendo un gran misterio.
La historia, está dividida en cuatro capítulos con títulos para nada elegidos al azar; El Agua, El Aire, El Fuego y La Tierra. Los cuatro elementos constituyen la base de cada historia y de cierta forma, la meta en cada momento. Pero más allá del misticismo que rodea esta división clásica tenemos otro añadido más a una amalgama increíble de retazos de distintas culturas, entre las que destaca la mitología inca y ciertos rituales como el de Capac Cocha, una práctica que desconocía totalmente y que me obligó a investigar a fondo en cuanto que se hace referencia a ella en la primera página de la historia.
Aparte de Juan, tenemos un amplio abanico de personajes cuyas historias o son desgarradoras o un acertijo; destaca entre ellos Aleluya, una chica que ha sido prostituida a cambio de agua por su propia familia desde su infancia. Aleluya encarna el deseo y la perdición, a la vez que se muestra como la inocencia. Pero también tenemos a Puck, el Niño Antena, el Señor Cometa y el resto de «outsiders«, la tripulación del submarino encallado y su desalmado teniente, Mara y su fiereza que supone la contraparte de Aleluya, e incluso la Viajera, que acabaremos sin conocerla del todo, representa un misterio continuo al que queremos acceder; el misticismo inca.
Ciertamente, Juan Buscamares es una obra que puede enamorar al lector que esté dispuesto a embarcarse en un viaje difícil de olvidar. Un cómic que va más allá de un género único y conjuga las aventuras, con lo onírico y la crítica social y religiosa y que si lo viéramos con los ojos entrecerrados, seguramente sería una poesía.
Para aquellos que quieran profundizar más en la obra, os dejo aquí una interesantísima entrevista del autor realizada por Viñetas del Fin del Mundo, que ciertamente completa la obra y nos da una visión mucho más cercana de la mente de Félix Vega: https://www.youtube.com/watch?v=JmuUBvJouVA
Apartado Gráfico
Cualquiera que haya ojeado el cómic, sabrá que decir que tiene un arte maravilloso, puede que sea quedarse corto. Un dibujo que va cambiando desde el principio hasta convertirse en algo suave y delicado, siempre con unas acuarelas inmejorables y una imaginería imposible. Félix crea ambientes, tecnología y personajes con gran versatilidad, y siempre transmitiendo con mucha fuerza las emociones y ambientación del momento. Mención aparte merecen sus rostros, la iluminación y las mujeres que dibuja, con un toque erótico y rebosantes de belleza. La obra en sí es una perfecta conjunción entre el guión y el dibujo y tenemos multitud de paneles desgarradores o simplemente inolvidables, ya sólo ver la portada del tomo recopilatorio, no creo que haya nadie al que como mínimo no le llame la atención. Nunca un desierto fue tan inhóspito ni un disparo dolió tanto como en estas páginas.
Por supuesto, hay que mencionar que Félix recibe ayuda en el color de su padre, Oskar Vega, uno de los historietistas chilenos más importantes y un genio con las acuarelas, si no me creéis, basta con una búsqueda para que disfrutéis de los cuadros de este artista.
Ediciones
En España, la obra fue publicada originalmente por Norma en su Colección Pandora sacando en volúmenes separados los cuatro capítulos de la historia, con encuadernación en rústica.
Pero el año pasado, Planeta Cómic nos sorprendió con un integral en cartoné y una nueva portada realizada por el autor para la edición chilena (que es exactamente igual que la española). Este integral, aparte de recopilar los cuatro capítulos, recoge material inédito, páginas descartadas, ilustraciones y bocetos, haciendo la edición perfecta de la obra, aunque si le tuviera que sacar un fallo, es que la portada del integral francés, que se utiliza para las guardas en tonos azules, no se muestra en los extras, y es una pena, porque es otra portada preciosa y habrían hecho un volumen inmejorable. Si alguien está interesado en la obra, pienso que esta es una de esas veces que merece la pena comprar el integral, además de que su precio (30€) es relativamente asequible, y desde luego un buen precio viendo como está el mercado.
Paranoia Secuencial 