RESEÑA Los Muertos Vivientes #27: La guerra de los susurradores

«He cambiado. Ya lo verás.»

Los Muertos Vivientes #27: La guerra de los susurradores contiene The Walking Dead #157-162.

Volumen anterior: Los Muertos Vivientes #26: Llamada a las armas

AVISO: La reseña que vas a leer a continuación no contiene ningún spoiler del volumen en cuestión, pero sí que podría contener spoilers relacionados con números anteriores.

De guerra en guerra y tiro porque me toca. Puede parecer que tanto conflicto es repetitivo, pero si lo pensamos fríamente, ¿qué otra opción tienen los supervivientes en un mundo tan hostil como el que aquí se plantea?

Los Susurradores ¿eran? una amenaza demasiado peligrosa para dejarla pasar por alto, más aún teniendo en cuenta que ya habían actuado de manera salvaje en el pasado sin una provocación clara por parte del bando de Rick, así que esta guerra era inevitable. La principal novedad es el nuevo papel de Rick; ya no está en primera línea sino que debe quedarse en la retaguardia planeándolo todo, ya que físicamente ha perdido mucho. Su antiguo papel, como vimos en el anterior volumen, es ocupado por Dwight, que tiene grandes capacidades militares. Si de novedades hablamos, no podemos olvidar a Negan, que lucha en el bando protagonista y parece que intenta redimirse, pero con él nunca se sabe, y más viendo la actitud del Santuario, ¿será la oportunidad de Negan de recuperar su antiguo puesto? De esta forma, tenemos por un lado las fuerzas unidas de Alexandria, la Cima y el Reino, que hacen uso de la inteligencia y la organización y por otro a los Susurradores con sus rebaños de caminantes que basan su fuerza en el número y el engaño.

La amenaza de los Susurradores, pese a ser la más peligrosa que han hecho frente hasta el momento, quizá tenga menos fuerza argumental que otras por esa falta de carisma por parte de los líderes, en este caso Beta.

Este volumen tiene la peculiaridad que muchas páginas están divididas en series de cuatro viñetas pequeñas, cada una de las cuales narra momentos en distintos lugares y protagonizados por distintos personajes, este aumento de viñetas, unido a un aumento de los diálogos hace que este volumen necesite de un poco más de tiempo para leerse. Lo mejor, como muchas veces, el final, que anuncia tormenta.