«Gracias por aceptar un currículum a doble cara»
A rebufo de la iniciativa All-New, All Different Marvel, nació una nueva oportunidad para el Hombre Hormiga. Precisamente él, conoce bien todo el tema de las oportunidades, ya que tuvo una para redimirse de su anterior vida como ladrón y convertirse en un héroe. Por supuesto, estoy hablando de Scott Lang y no de Hank Pym (el Hombre Hormiga original).
Es normal que con Scott de por medio el tono de su serie sea el de comedia. Pero no nos equivoquemos, ya que también tendrán gran peso los problemas del mundo real y será imposible no empatizar con el protagonista, que como en las tragedias clásicas, se ve arrastrado de manera involuntaria a una sucesión de situaciones complicadas que, con mayor o menor acierto tendrá que superar.
A nivel personal, Scott siempre había sido un personaje que me había llamado mucho la atención desde que leí Los Vengadores de Geoff Johns. Mis vengadores favoritos eran Scott y Sota de Corazones. Pero tras leer esta etapa, ya no es sólo un personaje llamativo, sino uno de mis favoritos.
Se puede empezar a leer sin haber leído nada del Hombre Hormiga anteriormente, ni siquiera se necesita haber leído ningún cómic de Marvel, ya que Spencer, con una maestría apabullante, nos pone al día de toda la historia de Scott Lang hasta el momento en el Ant-Man Vol 2 #1. Un número que funciona de manera perfecta por sí solo, y que podría haber quedado como un ejercicio autoconclusivo meritorio de un premio Eisner. Por suerte, la cosa no quedo sólo en eso, y podemos disfrutar de los guiones de Nick Spencer y los dibujos de Ramón Rosanas durante 20 números (Ant-Man Vol 2 #1-5, Ant-Man Vol 2 Annual #1, Ant-Man: Last Days #1 y The Astonishing Ant-Man #1-13).
Por circunstancias del destino (o mejor dicho su ex-mujer), se ve obligado a cambiar su base de operaciones a Miami, su ciudad natal, para poder ver a Cassie, su hija y antigua Joven Vengadora. Una vez allí, consigue el respaldo económico de Mrs. Morgenstern y funda su propia empresa de seguridad. Y esta vez es el turno de Scott de ofrecer segundas oportunidades, y contrata a Oso Pardo y Forjador de Máquinas, dos villanos de tercera fila un tanto peculiares y que generan todavía más situaciones cómicas. La relación que se da entre Scott y sus empleados es sencillamente inmejorable, con continuas bromas y diálogos muy cachondos.
Es completamente normal que el bueno de Scott se vea rodeado de estos personajes; reconozcámoslo, él mismo es un personaje de tercera, pero en el fondo, es ésto una de las cosas que le hace especial.
Como principales villanos, tendremos dos frentes distintos; Darren Cross (el primer enemigo de Scott) y Agente de Poder (Power Broker), que por su parte, también estarán enfrentados entre sí. Una de las cosas que más admiro es cómo ha utilizado Spencer a Cross desde el principio entretejiendo una historia inteligente en la que todo ha sido construir hacia el futuro. Aquí, cada número cuenta, y utiliza las circunstancias a su favor, como en el caso del cruce de la serie con las Secret Wars y el salto de 8 meses que vimos en todas las series. Esta no es una excepción, pero en lugar de seguir avanzando, nos iremos retrotrayendo en cada número para poder saber cuál es la situación actual de Scott y cómo ha llegado ella, no sin antes permitirse un chascarrillo, y comenzar el The Astonishing Ant-Man #1 (el primer número tras el salto temporal) y comenzar el cómic con Scott diciendo: «¿¿¿Ocho meses??? ¡Wow! ¿Cómo pasa el tiempo verdad?».
Incluso el Ant-Man Vol 2 Annual #1, que como acostumbran los anuales es una historia autoconclusiva y alejada en cierto modo del flujo normal de la serie, sirve para plantar semillas que serán de una gran importancia en el futuro. Se construye siendo respetuoso con el transcurso de otras series y aprovechándolas (concretamente la novela gráfica La Cólera de Ultron). Aparte, supone un vistazo a la relación de Scott con Hank Pym y las diferencias entre ambos, y pese a explorar su relación, tenemos de fondo ese filtro cómico que tienen todos los números. Como colofón, el manto del Hombre Gigante cambiará de portador, convirtiendo a Scott en esta ocasión, en el maestro.
Si tuviera que ponerle una pega, sería que al principio de cada capítulo, se suele hacer un repaso a lo que ha venido pasando hasta el momento, y leyendo los números de seguido, se puede hacer un poco pesado ya que rompe el ritmo de lectura. Pero por supuesto, hay que entender que esto fue publicado mes a mes, y las sensaciones en la lectura mensual debieron ser muy distintas.
Un trabajo muy en la línea de otros grandes trabajos contemporáneos a esta serie, como Estela Plateada de Slott y Allred, el Caballero Luna desde Ellis a Lemire, la Visión de King y Walta o la Hulka de Soule y Pulido.
Podría seguir escribiendo sobre lo mucho que me ha gustado esta serie, pero no serviría de nada, esto es algo que hay que disfrutar siendo conscientes del producto que es. Que nadie espere argumentos o reflexiones grandilocuentes, aquí hay que estar preparado para otra cosa totalmente distinta; guiones frescos e inteligentes, personajes carismáticos, situaciones y diálogos que de verdad harán reír, un arte precioso de una manera muy desenfadada y sobretodo, el complicado día a día de Scott Lang, el increíble Hombre Hormiga.
Apartado Gráfico
Si la serie ya se aleja de lo habitual en el género superheroico en cuanto a historia, el arte también decide dejar de lado los estándares habituales. El dibujante es Ramón Rosanas, y sí, es español. Su dibujo es fresco, muy limpio y con gran expresividad en los rostros. Los diseños de personajes están muy curiosos y da en la tecla en todo momento a la hora de transmitir el movimiento. Al igual que su trazo, su narración gráfica es clara y directa, llega sin ningún obstáculo y agiliza la lectura una barbaridad.
Como apoyo en ciertos números para que descanse Rosanas, dibujan Brent Schoonover y Annapaola Martello, ambos con estilos muy indie, pero distintos entre ellos. Pese a que realizan un trabajo correcto, echaremos de menos a Ramón Rosanas.
Al color tenemos a Jordan Boyd y a Wil Quintana. Se mantienen en la línea del dibujo y aportan una paleta de color moderna y desenfadada. Pese que no crean excesivo volumen, creo que habría estado todavía mejor con colores totalmente planos.
Ediciones
Para disfrutar de esta genial etapa, hay muchas opciones; en el mercado americano:
-Grapas originales.
-4 tomos TPB. (Ant-Man Volume 1 y The Astonishing Ant-Man Volumes 1-3)
–The Astonishing Ant-Man: The Complete Collection TPB (un recopilatorio con la etapa completa de Spencer).
En España la única opción son los tres tomos que publicó Panini en formato 100% Marvel con toda la etapa.
Yo por mi parte he elegido el Complete Collection, y he de decir que es una opción muy buena, ya que el precio es bastante asequible y es un volumen muy manejable. Pese a que pueda asustar un tomo de casi 500 páginas encuadernado en rústica, para mi sorpresa, el tomo es muy resistente, y soporta las lecturas sin resentirse lo más mínimo, además de tener un diseño de lomo muy original y resultón. En cuanto a extras se refiere, sólo incluye las portadas alternativas. Un detalle que me ha gustado es la presencia de una especie de índice donde figura cada autor y los números en los que ha participado.